Cambios. Cambios. Cambios.
Dicen que son para bien, pero a veces son una patada en los huevos.
Personas que se esfuerzan en cambiar. ¿Para qué?
La gente va a seguir hablando mal. Siempre tienen algo que criticar.
Cambios. Cambios. Cambios.
¿Los queremos? ¿Los quiero? ¿De qué me sirven?
Si algún día moriré, nadie va a recalcar que tuve cambios.
Solo se enterrarán conmigo. (me doy miedo, estoy siendo muy depresiva).
Dicen que envejecer es otra parte de la vida.
¿La quiero? ¿Se podría saltear, por favor?
No es que tenga miedo al cambio o a envejecer o a morir, o tal vez si, no sé.
Creo que no podría mirarme al espejo y verme vieja, mirar a mi alrededor, ver como todo va cambiando, como la vida se me escapa de las manos, ver como todo va creciendo, como todo continua su rumbo.
A veces solo quiero detener el tiempo y gritar, como nunca, como nunca me animé.
Pensar si lo que quiero es retroceder, quedarme o seguir.
Ver como personas se van yendo. Las despedidas. ¿Las soportaré?
No tolero que las cosas cambien y las cosas están cambiando, ya lo tengo asumido.
Pero también, si no cambian es todo muy aburrido, así que ando medio estancada.
El tiempo no existe, pero los relojes si.
El reloj nos impone los limites.Creo que es hora de sacármelo.
Dicen que es parte de la vida, un círculo vicioso. Pero quizás no me gustan los círculos. Tal vez me gustan los cuadrados o los triángulos.
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